16 fieles laicos representaron a todo el Pueblo de Dios.
Institución de los Ministerios de Lectores y Catequistas, Ver minutos: 50:50 – 1:07:35.
“Recibe el libro de las Sagradas Escrituras y transmite fielmente la Palabra de Dios para que germine y fructifique en el corazón de los hombres”.
«Recibe este símbolo de nuestra fe, cátedra de la verdad y de la caridad de Cristo: anuncia a Él con la vida, las acciones y la palabra”.
Con estas palabras el Papa Francisco ha instituido los primeros ministros lectores y ministros de la catequesis en la Iglesia Católica en el Domingo de la Palabra de Dios 2022. ¡Recemos por ellos y por todos los lectores y catequistas!
Oración de los fieles
Toca, Señor, el corazón de los nuevos lectores para que a través de su ministerio la Palabra de Dios sea sembrada con intensidad, germine y fructifique en el corazón de los hombres y se difunda por todas partes.
Dirige tu mirada amorosa, Señor, a los catequistas hoy instituidos para que con sinceridad apostólica lleven a todos los hombres la alegría del Evangelio.
Papa Francisco instituye por primera vez el ministerio laical de lectorado y catequistas
Durante la Misa celebrada en la Basílica de San Pedro del Vaticano por el Domingo de la Palabra de Dios este 23 de enero, el Papa Francisco instituyó por primera vez los ministerios de lector y catequista a fieles laicos, hombres y mujeres, procedentes de diferentes partes del mundo.
Se trató de la primera vez que el Santo Padre instituye el ministerio laical de lectorado y catequistas y en el Vaticano recibieron el ministerio del lectorado ocho fieles laicos -seis mujeres y dos hombres- y otras ocho personas recibieron el ministerio laical de catequista -cinco hombres y tres mujeres-.
El Papa Francisco instituyó el Domingo de la Palabra de Dios, con el Motu Proprio Aperuit Illis del 30 de septiembre de 2019 para que la Iglesia Universal celebre cada tercer Domingo del Tiempo Ordinario con el fin de “crecer en el pueblo de Dios la familiaridad religiosa y asidua con la Sagrada Escritura”.
El 10 de enero de 2021 el Santo Padre modificó el Código de Derecho Canónico con el Motu Proprio Spiritus Domini que cambió el canon 230 § 1 para dar acceso de las mujeres al ministerio instituido del lectorado y acolitado.
Además, el Papa instituyó el ministerio laical de catequista con la carta apostólica en forma Motu Proprio “Antiquum ministerium” (antiguo ministerio) el 11 de mayo de 2021 en la que también solicitó la elaboración de un itinerario de formación, la descripción de los criterios normativos para acceder al ministerio y la publicación del rito de institución de tal ministerio laical.
Rito de institución
Antes de la homilía del Papa, un diácono leyó el nombre de los candidatos al ministerio de lectorado y el ministerio de catequista, después de mencionar el nombre, cada candidato, candidata, respondió “Eccomi” (heme aquí).
En concreto, se trató de 16 fieles laicos presentes en el Vaticano, que fueron en representación de todo el Pueblo de Dios. Entre los candidatos al ministerio del lectorado se encontraron personas procedentes de Corea del Sur, Pakistán, Ghana y varias partes de Italia, mientras que los candidatos al ministerio de catequistas se encontraron dos laicos del Vicariato Apostólico de Yurimaguas (Perú) en la Amazonia, dos fieles de Brasil que ya están involucrados en la formación de catequistas, una mujer de Kumasi, Ghana, el actual Presidente del Centro de Oratorios Romanos (el Centro Oratori Romani), un laico de Łódź (Polonia) y una fiel laica de Madrid (España).
Según informó el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización, “debido a las dificultades de viaje causadas por las actuales restricciones sanitarias, no fue posible la esperada presencia de dos fieles de la República Democrática del Congo y de Uganda”.
Después de pronunciar su homilía, en la que invitó a colocar la Palabra de Dios “en el centro de la pastoral y de la vida de la Iglesia” a escucharla, a rezar con ella para ponerla en práctica, el Santo Padre presidió el rito de institución al ministerio laical del lectorado y de catequistas preparado por la Congregación para el Culto Divino.
Los nuevos ministros al lectorado recibieron una Biblia, mientras que los ministros catequistas recibieron un crucifijo plateado, reproducción de la cruz pastoral utilizada primero por San Pablo VI y luego por San Juan Pablo II.
En primer lugar, el Papa destacó que siendo lectores “es decir, anunciadores de la Palabra de Dios, están llamados a colaborar a este compromiso primario en la Iglesia” porque se colocan al “servicio de la fe, la cual tiene su raíz y su fundamento en la Palabra de Dios”.
“Proclamarán la Palabra de Dios en la asamblea litúrgica; educarán en la fe a los niños y a los adultos y los conducirán a recibir dignamente los Sacramentos; llevarán el anuncio misionero del Evangelio de salvación a los hombres que todavía no lo conocen”, señaló el Papa.
Los ocho candidatos -seis mujeres y dos hombres- al ministerio del lectorado se colocaron de pie frente al Santo Padre y tras las palabras del Papa los candidatos se hincaron para recibir la bendición en la que los alentó a que en la meditación de la Palabra de Dios sean “íntimamente iluminados para convertirse en fieles anunciadores a sus hermanos”.
Finalmente, el Papa entregó a cada uno una Biblia diciendo
“Recibe el libro de las Sagradas Escrituras y transmite fielmente la Palabra de Dios para que germine y fructifique en el corazón de los hombres”.
De igual forma, los ocho candidatos al ministerio laical de catequista -cinco hombres y tres mujeres- se pusieron de pie delante del Papa colocado en el Altar de la Cátedra.
En su exhortación, el Santo Padre alentó a los “llamados al ministerio estable de catequista a vivir más intensamente el espíritu apostólico, bajo el ejemplo de los hombres y mujeres que ayudaban a San Pablo y a los otros apóstoles en la difusión del Evangelio”.
“Su ministerio esté siempre radicado en una profunda vida de oración, edificado en una sana doctrina y animado por un verdadero entusiasmo apostólico”, señaló el Papa.
Luego, los candidatos se hincaron delante al Papa mientras que también los bendijo para que “vivan plenamente su Bautismo colaborando con los pastores en las diversas formas de apostolado para la edificación de tu Reino”.
Después, el Santo Padre entregó a cada uno un crucifijo plateado, con las palabras
“Recibe este signo de nuestra fe, cátedra de la verdad y de la caridad de Cristo: anuncia a Él con la vida, las acciones y la palabra” y cada uno respondió: “Amén”.
La oración de los fieles fue leída en coreano, portugués, chino, francés y polaco.
Domingo de la Palabra de Dios
El Papa Francisco instituyó el “Domingo de la Palabra de Dios” el 30 de septiembre de 2019 en el día de la fiesta de San Jerónimo, famoso por su traducción de la Biblia al latín, conocida como la “Vulgata”.
El título de la carta apostólica en forma de Motu Proprio titulada Aperuit Illis se basa en el pasaje bíblico de San Lucas del capítulo 24 en el que se describe el gesto de Jesucristo a los discípulos con el cual “les abrió el entendimiento para comprender las Escrituras”.
“Dedicar concretamente un domingo del año litúrgico a la Palabra de Dios nos permite, sobre todo, hacer que la Iglesia reviva el gesto del Resucitado que abre también para nosotros el tesoro de su Palabra para que podamos anunciar por todo el mundo esta riqueza inagotable”, escribió el Papa.
Fuente: aciprensa.com
Francisco confiere ministerio laico del lectorado a varias mujeres
Francisco celebró la Misa en la basílica de San Pedro para la celebración del domingo de la Palabra de Dios.
Por primera vez, el Papa utilizó el nuevo rito para conferir el ministerio laico del lectorado que abrió a las mujeres el año pasado, así como el nuevo rito para el ministerio de catequista, que estableció en mayo.
FRANCISCO
«Estáis llamados a la importante tarea de servir al Evangelio de Jesús, de anunciarlo para que su consuelo, su alegría y su liberación lleguen a todos. Esta es también la misión de cada uno de nosotros: ser heraldos creíbles, profetas de la Palabra en el mundo».
Tras la homilía del Papa, seis mujeres y dos hombres procedentes de Corea del Sur, Ghana, Pakistán e Italia se arrodillaron ante el altar mayor para recibir el ministerio.
Se acercaron al Papa, que les entregó una Biblia a cada uno, y confirió formalmente a seis mujeres el ministerio del lectorado con estas palabras:
-«Recibe el libro de las Sagradas Escrituras y transmite fielmente la palabra de Dios para que germine y dé fruto en el corazón de las personas».
-«Amén».
A continuación, los ocho candidatos a catequistas, procedentes de España, Ghana, Italia, Brasil, Perú y Polonia, se presentaron ante el altar. El Papa los bendijo y entregó a cada uno un crucifijo. Luego confirió formalmente el primer ministerio del catequista.
-«Recibe este signo de nuestra fe que trata de la verdad y la caridad de Cristo. Le proclama con hechos y palabras».
-«Amén».
Es la primera vez que se utiliza este rito, preparado por la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos.
Después, el Papa salió en procesión de la basílica de San Pedro con el mismo báculo utilizado por el Papa Juan Pablo II.
Fuente: romereports.com – JM – TR: BGA
Ministras de Francisco: laicas y catequistas
Ocho seglares catequistas, a los que se unieron ocho lectores, ministerio puesto en marcha el pasado año. De los primeros catequistas reconocidos institucionalmente por la Iglesia, una es de España y cuatro, de Latinoamérica. Se trata de Rosa María Abad, de la Archidiócesis de Madrid; Wanderson Saavedra Correia y Regina de Sousa Silva, de la Diócesis de Luziânia, en Brasil; Víctor Hidalgo Chumbe y Martiniano Dávila Yalta, de la Diócesis de Yurimaguas en Perú.
Lo cierto es que el continente del Papa argentino ha estado a la vanguardia de la renovación de la catequesis. Así lo asegura Omar Osiris López García, de la Arquidiócesis de México y oficial en el Pontificio Consejo para la Promoción de la Nueva Evangelización. “Providencialmente, Latinoamérica ya venía promoviendo este ministerio desde hacia más de una década”.
El sacerdote subraya que “algunas diócesis de México, Venezuela y Brasil venían instituyendo de manera temporal a algunos laicos, varones y mujeres, como ministros catequistas”, como también “las conferencias episcopales de Venezuela, de Brasil y la Arquidiócesis de México publicaron algunos documentos pastorales para orientar y promover su institución”. Asimismo, el área de Catequesis del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) ha propiciado encuentros regionales entre comisiones episcopales para realizar consultas y compartir experiencias y “han visto conveniente la institución de este ministerio de forma estable”.
Misión laical
Además, López apunta que estos nuevos ministros de América Latina son una muestra palpable del camino emprendido en el continente para “hacer realidad las directrices del Concilio Vaticano II, poniendo de relieve la misión de los laicos en la obra evangelizadora de la Iglesia”. En este sentido, cita el documento La alegría de iniciar discípulos misioneros en el cambio de época. Nuevas perspectivas para la catequesis en América Latina y el Caribe, que ofrece una serie de orientaciones para la formación de los candidatos a este ministerio y los lugares para su ejercicio, mientras que, en 2019, durante la I Semana latinoamericana y caribeña de iniciación a la vida cristiana, “se puso en perspectiva la importancia de los laicos para el desempeño de ciertos ministerios en y para la Iglesia”.
Por otra parte, a juicio del presbítero mexicano, el Documento final del Sínodo amazónico pone de relieve la insistencia de una nueva ministerialidad en la Iglesia; por eso, “los participantes vieron urgente promover y conferir de manera equitativa algunos ministerios a hombres y mujeres a partir de la conciencia de su dignidad bautismal”.
Son once años los que Regina de Sousa Silva lleva de vocación catequética. Ella es la primera laica brasileña en recibir el ministerio de catequesis. Reside en el estado de Goiás, región centro-oeste del coloso sudamericano. Sirve en la Diócesis de Luziânia, jurisdicción sufragánea de la Arquidiócesis de Brasilia, específicamente en la parroquia Nuestra Señora de Fátima, donde coordina la catequesis.
Actitud del buen samaritano
Refiere que Waldemar Passini Dalbello, obispo de la zona, la invitó junto con su compañero Wanderson Saavedra a recibir el ministerio de catequista en el Vaticano. “De inmediato organizamos el viaje y buscamos la documentación necesaria”, rememora. Nunca imaginó recibir esta distinción y admite ser consciente de que “nosotros estamos aquí representando a todos los catequistas”, porque “la catequesis es construida por hombres y mujeres sobre la acción del Espíritu Santo” que “dedican su vida por ser un servicio esencial para la vida de la Iglesia”.
En un país tan extenso y diverso como Brasil, los catequistas tienen grandes desafíos. Entre ellos, apunta Regina, “debemos despertar el entusiasmo de cada bautizado para que escuche la voz del Espíritu Santo, que nunca falte su presencia que es fecunda en nosotros, para que podamos revelar a Dios a todas las personas”. Su contribución como mujer se refleja en el trabajo de todas aquellas compañeras que “se encuentran al servicio de diversas pastorales para evangelizar desde la verdad”, en un mundo que “demanda cambios”.
Mientras tanto, considera fundamental, en ambientes tan crispados como el político, asumir la actitud del buen samaritano, en especial, la “escucha atenta y tierna para crear puentes entre nosotros y caminar juntos”.
Honor y gracia
Sus inicios en la enseñanza de la fe se dieron de la mano de su catequista, quien la motivó a seguir este camino, puesto que “yo quería llevar la Palabra de Dios, yo quería tener un trabajo en la Iglesia, un trabajo bonito donde pudiese hablar sobre ese amor a Dios. Yo sentía que ese amor debía pasarlo a otras personas, no cabía más en mí”. De este modo, comenzó su periplo, cuyo frutos recoge con la satisfacción del trabajo cumplido. Por ahora, más allá de las muestras de alegría por compartir con sus colegas del mundo en la Plaza de San Pedro, Regina ratifica su misión de “continuar tal como venía haciéndolo con pasión, amor y entrega”.
Wanderson Saavedra Correia, por su parte, como Regina, lleva once años de servicio en Luziânia y actualmente se desempeña como formador de catequistas de toda la diócesis. Es el primer laico brasileño en recibir el ministerio de manos de Bergoglio. Para él, sin duda, es “un honor como representante del país, un reconocimiento del caminar de quienes enseñan la Palabra y como muestra de cariño del Papa hacia todos nosotros. Es una gracia representar a todos nuestros hermanos y hermanas aquí en Roma”.
Por tanto, “lo veo como un regalo de Dios, y esa es nuestra mayor victoria: poder ser semillas del Evangelio”. El joven catequista sabe que su labor va más allá del simple voluntariado, afirma que “es un compromiso con Dios, comprometerse con esta forma de vida. Una vez que eres catequista, siempre serás catequista”, vocación en la que “Cristo es el centro de tus acciones, y más todavía en esta sociedad tan digitalizada, donde todo está al alcance de tu mano, pero a la vez nos encontramos más separados”. En este sentido, agradece al Santo Padre el gesto fraterno y manifiesta que “los catequistas brasileños le aman por todo lo que ha hecho por nosotros”.
Ampliar la oferta
Víctor Hidalgo Chumbe y Martiniano Dávila Yalta conocen al dedillo la expresión “desgastar la suela de los zapatos”. Ambos pertenecen al Vicariato apostólico de Yurimaguas, zona nororiental de Perú, donde se han destacado por su servicio con las comunidades más pobres de toda esta comarca amazónica.
Martiniano, laico pasionista, debido a las grandes distancias entre las 16 comunidades que integran el vicariato, ha tenido que hacer caminatas de hasta 20 días para “enseñar el mensaje de Dios”. Recibir de Francisco el ministerio de la catequesis “es un privilegio y, a la vez, una responsabilidad grande”, confiesa. En su diccionario no figura “el no puedo”, porque “en las regiones de donde venimos nos toca hacer las veces de sacerdote, médico y psicólogo”.
Víctor Hidalgo refrenda a su compañero. En la Amazonía, los catequistas amplían su oferta “más allá de los sacramentos propiamente dichos”. Por ejemplo, “en mi caso, organizo actividades con todos: niños, jóvenes y adultos. Así como llevas la Palabra, debes emprender proyectos de diversa índole, desde apoyar a damnificados hasta organizar cooperativas socioproductivas”.
Fuente: vidanueva.es
Entradas relacionadas en esta web
Con un motu proprio Francisco instituye el «ministerio del catequista». 11 mayo 2021.
Instituido el ministerio laical de Catequista en Madrid y en España. 23 enero 2022.
Francisco pide rezar por los catequistas: «Enseñar y anunciar el Evangelio».
Presentado el nuevo Directorio para la Catequesis: el Evangelio siempre actual.