Pascua Dominical. Eucaristía en Casa y en Parroquia.
Llena tu lámpara
Mt 25,1-13. El aceite de Cristo es fundamental para la Iglesia, para cada cristiano. Si nos falta, no podemos funcionar. Mejor, funcionamos porque Él nos comunica la fuerza de su amor, como sucede con la unción bautismal. Llena tu lámpara.
No seamos necios, como las doncellas del Evangelio, sino más bien espabilados, despiertos, atentos a que nunca en nuestra vida falte el aceite, la conexión con Cristo. No se puede funcionar sin ese aceite, tampoco podemos iluminar. De Él nos viene y al servicio de Él estamos. Que nuestra oración, nuestra manera de relacionarnos con los demás, nuestro compromiso, nuestro trabajo, nuestra solidaridad estén en contacto con el único que da sentido a nuestra vida: Jesús. Llena tu lámpara.
Este aceite no se expende en gasolineras o en establecimientos especializados. Este óleo es un don, que lo recibe quien abre su corazón a la amistad con Jesús, quien espera atento, quien le reconoce como Rey. Llena tu lámpara.
Fuente: Dibujo: Patxi Fano – Texto: Fernando Cordero ss.cc.
Preparados – 32º Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo A
Mt 25,1-13. En la parábola que hoy nos presenta Jesús compara a quien está preparado para el Señor y a quien no. Es una parábola dura, que pretende transmitir la importancia de su significado. La consecuencia si no estás preparado es brutal: te quedas fuera. Así que la pregunta es ineludible ¿estás preparado para el señor?
¿Qué significa estar preparado? Significa vivir despierto y atento, para encontrar a Jesús cuando sale a nuestro encuentro en lo más cotidiano. Significa estar listo para hacerlo presente ahí donde no le encontremos, siendo nosotros testigos vivos del amor del Padre y Madre. Estar dispuestos a construir el Reino ya, donde estemos, ponernos manos a la obra.
Si quieres seguir a Jesús tienes que vivir como él: sin excusas, sin peros, siempre listo para hacer la voluntad del Padre y Madre Dios. No en un momento concreto, no en un espacio concreto… porque nunca sabes cuándo el Señor te va a necesitar. Eso es estar preparado.
Así que contéstate la pregunta ¿estás preparado para el señor?
Prepárate para el Señor.
Para la reflexión y la oración… – ¿Cuándo te sientes preparad@ para el Señor? Piensa en un momento o situación concreta. – ¿Qué debes dejar atrás para que esta actitud dispuesta sea una constante en tu vida? – Expresa tu respuesta al Padre en forma de oración…
Fuente: Editorial Verbo Divino – EVD.
Este domingo se celebra el Día de la Iglesia Diocesana
«Orgullosos de nuestra fe». Día de la Iglesia Diocesana. 12 noviembre 2013.