Vive la Pascua Dominical en la Eucaristía en Casa y en la Parroquia.
Pentecostés: al aire del Espíritu
El Señor Resucitado hace que no tengamos miedo y que vivamos con alegría nuestro ser cristianos, testigos suyos en medio del mundo. “Recibid el Espíritu Santo”. Recibid el Espíritu para volar, para soñar, para transformar, para colorear la vida y enseñar a mirar con los ojos del Resucitado. Una Iglesia alegre, alentada por el aire del Espíritu, que nos zamarrea, nos lleva de acá para allá, no nos deja estáticos, sino en un dinamismo continuo. Una Iglesia que es familia, de los que comparten la fe en el Resucitado. Una Iglesia que no se queda en los criterios del mundo, de la tierra, sino que es Iglesia que se “eleva” sobre los intereses y las limitaciones humanas. Al mismo tiempo es una Iglesia encarnada y solidaria con los que más sufren, pero llevada por las alas del Espíritu.
Envíanos tu Espíritu, para que no olvidemos a los pobres y humildes, a aquellos que llevan en su corazón el sello de tu amor.
Fuente: Dibujo: Patxi Velasco FANO – Texto: Fernando Cordero, ss.cc.

Esa chispa – Pentecostés, Ciclo C
Jn 14,15-16.23b-26. Este pequeño cuento de Eduardo Galeano nos sirve para recordar qué efecto tiene el Espíritu Santo en nosotros. Así, como un fueguito, tenemos la chispa que Jesús nos dejó, a veces con más o menos fuerza, otras de un color u otro…pero siempre dentro de nosotros. Cada vez que ayudamos a alguien, que escuchamos con amor, que cuidamos a las personas que tenemos a nuestro alrededor o denunciamos una injusticia que estamos viendo o viviendo, esa chispa se reaviva e incluso, se contagia a otras personas.
Fuente: Editorial Verbo Divino – EVD.
PENTECOSTÉS: EL ESPÍRITU DE LA RECONCILIACIÓN APARENTEMENTE IMPOSIBLE, Ciclo C
Fuente: José Cristo Rey García Paredes.
En este domingo se celebra el Día de la Acción Católica y del Apostolado Seglar
