Tres frases que Jesús pronuncia durante el momento de su pasión: «Padre, ha llegado la hora: glorifica a tu Hijo»; «Abbá» y «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen».
Durante la audiencia general de Semana Santa el Papa Francisco reflexionó sobre tres frases que Jesús pronuncia durante el momento de su pasión: «Padre, ha llegado la hora: glorifica a tu Hijo»; «Abbá» y «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen».
Explicó por qué “en la cruz, Jesús manifiesta su gloria” y que “es allí donde está realizando de forma definitiva la salvación a los hombres”.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS DEL PAPA EN ESPAÑOL
“Queridos hermanos y hermanas:
Hoy reflexionamos sobre tres palabras que Jesús dirige al Padre durante el momento de su Pasión. La primera es: «Padre, ha llegado la hora: glorifica a tu Hijo» (Jn 17,1). La gloria significa la revelación de Dios como signo de su presencia salvadora entre los hombres. En la cruz, Jesús manifiesta su gloria porque es allí donde está realizando de forma definitiva la salvación a los hombres.
La verdadera gloria es la del amor. En la Pascua comprobamos cómo el Padre glorifica al Hijo, mientras el Hijo glorifica al Padre. Ninguno se glorifica a sí mismo, sino al otro. Así, el actuar de Dios nos tiene que interpelar, para que no busquemos nuestra propia gloria sino la de Dios y la de los demás.
La segunda palabra es: «Abbá», papá (cf. Mc 14,36). Jesús, cuando experimentó en el huerto de Getsemaní la angustia y la soledad ante su Pasión, se dirigió a Dios llamándolo “papá”. Nos enseña a tratar a Dios como un padre, porque en Él se encuentra la fuerza para seguir adelante en el dolor.
En la desolación, Jesús no está solo porque está con el Padre. En cambio, nosotros, cuando nos encontramos en situaciones difíciles preferimos muchas veces la soledad, antes que decir “Padre” y confiar en Él.
Por último, Jesús dice: «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen» (Lc 23,24). Él reza por los que lo están crucificando. Era el momento más agudo de dolor; pero es ahí donde se llega al culmen del amor, en el perdón, que rompe el círculo del mal. Jesús reza por nosotros al Padre, para que nos envuelva con su misericordia, que trasforma y sana el corazón.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española venidos de España y de Latinoamérica. Pidamos al Señor que la celebración de la Pascua no sea sólo un momento más en nuestra vida, sino que nos impulse a vivir cada día para la gloria de Dios, confiando al Padre las pruebas que nos afligen y encontrando en Él el abrazo misericordioso que nos anima a perdonar a los demás.
Que el Señor los bendiga”.
Fuente: Rome reports.
Papa en la audiencia general de Semana Santa: El perdón hace pedazos el círculo del mal.
Durante la audiencia general el Papa reflexionó sobre varios de los mensajes que Jesús transmitió durante su Pasión. Por ejemplo: en ella se ve que Dios no busca su gloria personal.
También habló de cómo Jesús reacciona ante la soledad: no se encierra en sí mismo, sino que reza. Se abandona a Dios y esta actitud confiada es la que le permite perdonar.
FRANCISCO
“Era probablemente el momento del dolor más agudo, cuando a Jesús le clavaron los clavos en las muñecas y en los pies. Aquí, en el vértice del dolor, el amor llega a su culmen. Llega el perdón, es decir, el don a la enésima potencia, que destroza el círculo del mal”.
El Papa también dirigió un mensaje de apoyo a Francia, tras la tragedia de la catedral de Notre Dame.
FRANCISCO
“Queridos hermanos y hermanas: me ha causado mucho dolor y me siento muy cercano a todos vosotros. A cuantos han trabajado, arriesgando a sí mismos, para salvar a la basílica, va la gratitud de toda la Iglesia”.
El Papa dirigió estas palabras a los participantes en el foro UNIV. Se trata de un congreso en el que participan estudiantes universitarios de los cinco continentes y que fue promovido por San Josemaría Escrivá, fundador del Opus Dei.
FRANCISCO
“Queridos jóvenes que vivís estos días de formación. Según el ejemplo de San Josemaría, fundad siempre más vuestra vida en los valores de la fe hasta que, cambiándoos a vosotros mismos según el modelo de Cristo, podáis transformar el mundo que os rodea”.
Esta fue la última audiencia pública antes de iniciar las principales ceremonias litúrgicas de la Semana Santa.
El Jueves Santo visitará una prisión en las afueras de Roma, el viernes presidirá el Vía Crucis en el Coliseo, que este año está centrado en el drama de la trata de personas. El sábado y el domingo celebrará la Resurrección desde el Vaticano, donde impartirá la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de San Pedro.
Fuente: Rome reports.